Presidente de IATA expone falencias en concesiones e infraestructura aeroportuaria en Colombia

Durante su visita a Colombia, el presidente de IATA, Giovanni Bisignani, se refirió a la situación actual del mercado aéreo en Colombia, haciendo especial énfasis en la problemática actual en cuanto a infraestructura y las deficiencias en el manejo del sistema de concesiones.

Con la presencia del Ministro de Transporte, del Director de la Aerocivil, el Comandante de la Fuerza Aérea Colombiana, presidentes de varias aerolíneas que operan en Colombia, líderes gremiales del sector y miembros del Congreso, el Presidente de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo, IATA (por sus siglas en inglés) se refirió sobre la situación del mercado aéreo internacional, latinoamericano y colombiano.

Bisignani resaltó la política e interés del Gobierno en impulsar la industria aérea y turística de nuestro país, sin embargo se destacó algunas falencias en cuanto al manejo de las concesiones aeroportuarias y al control de tráfico aéreo que actualmente generan ineficiencia en la operación aérea en Colombia.

 

Falta infraestructura. Modelo de concesiones está mal estructurado

Destacó la necesidad imperante de ampliar la infraestructura aeroportuaria, pero con una visión de por lo menos 10 años a futuro, debido a que actualmente, con el ritmo de crecimiento del mercado y el ritmo de mejora en infraestructura, los aeropuertos, especialmente Eldorado, van a ser insuficientes al momento de terminar su ampliación y remodelación. “Creo que necesitan empezar ya, creo que necesitan implementar un nuevo plan maestro para la ampliación del aeropuerto, y la construcción de una tercera pista”, comentó Bisignani.

El éxito en la privatización de un aeropuerto está en que todos los actores involucrados se enfoquen a mejorar la eficiencia operativa, más no a la producción de ingresos económicos. En el caso de Eldorado, “la concesión está mal estructurada”. Con el 46% que OPAIN obtiene de los ingresos como operador de la terminal aérea que le entrega el Gobierno colombiano, ambos (concesionario y Gobierno) se enfocarían en obtener la mayor ganancia, dejando en un segundo plano la búsqueda de la eficiencia.

Para el éxito de las concesiones, se debe tener una autoridad eficaz que reglamente la administración de los aeropuertos para evitar incrementos en tarifas no reguladas, situación que se ha presentado en varios aeropuertos del país.

Destacó que nuestro país tiene varios puntos a favor en este aspecto, entre ellos, la posibilidad de contar con espacio disponible para realizar las ampliaciones, además de no tener las mismas restricciones ambientales que existen en otros países.

 

Por otro lado, se refirió a la necesidad de mejorar la eficacia operacional en el lado aire de la operación aérea en Colombia. Para Bisignani, la inversión realizada por las compañías aéreas en adquisición de nueva tecnología que mejore la operatividad, se ve desperdiciada al encontrar un control de tráfico aéreo rezagado en términos tecnológicos. “Podemos aumentar un 30% la capacidad con nuevos equipos que no son muy costosos, ya que son una actualización de los sistemas actuales; además de un entrenamiento de los controladores, lo que se puede realizar en un tiempo muy rápido y sin mayores inversiones”.

Si bien en nuestro país se vienen adelantando importantes esfuerzos para mejorar el lado aire en la operación aérea (desde el año 2006 ATACA y IATA trabajan con el Gobierno colombiano para implementar mejoras en la navegación RNAV), es necesario aumentar el número de controladores aéreos, así como aumentar su número en los centros de control en el país.

También criticó el hecho de que en Colombia existan aún legislaciones y procedimientos que no existen en otro país del mundo y que disminuyen la efectividad operacional. Tal es el caso de la báscula del aeropuerto Eldorado, comparando el proceso de pesar a los aviones, con el que se realizaba en los aeropuertos hace más de 60 años.

Por su parte, el presidente de la Asociación del Transporte Aéreo en Colombia, Manuel Leal, también se refirió a la necesidad de mejorar la infraestructura, tanto en el lado tierra como en el lado aire. La aviación en Colombia es uno de los motores de desarrollo más importantes actualmente. Prueba de ello es su rápido crecimiento en los últimos años, sin embargo, aseguró que el desarrollo de la aviación no se hace con la firma de acuerdos bilaterales (de más de 30 acuerdos firmados entre Colombia y otros países, son efectivos menos de 10), sino con el trabajo eficaz sobre la infraestructura con que se cuenta y su mejora progresiva.

En palabras del Ministro de Transporte, Germán Cardona, a la aviación colombiana la “atropelló el éxito”, refiriéndose al incremento en las operaciones aéreas, pero a la existencia aún de obstáculos  que generan cuellos de botella y falencias en la operación.

Bisignani sostendrá reuniones con varios líderes gubernamentales y privados del sector aéreo en Colombia, para hablar de las recomendaciones que la IATA trae para mejorar la situación actual en nuestro país. En próxima reunión con el Presidente de la República, el Presidente de IATA le dará a conocer los puntos clave para trabajar durante los próximos años, especialmente en lo que tiene que ver con el impulso a la industria aérea y al sector turístico.