Siendo este el objetivo, un oficial de la Institución, de manera empírica realizó los estudios sobre mimética o mimetismo, que es la habilidad que poseen algunos seres vivos para asemejarse a otros organismos con los que no guarda relación y a su propio entorno para obtener alguna ventaja funcional. De aquí nace el Sistema de Camuflaje Táctico Aeronáutico -SICTA- , que con una tecnología que permite engañar el sentido de la visión, basó su desarrollo principalmente en el comportamiento de los reptiles.
Luego de realizar varias pruebas e impresiones sobre pixeles, y en una alianza con el apoyo de la empresa textil Fabricato, se pone en marcha la creación del nuevo uniforme, que de acuerdo a los estudios arrojó resultados muy favorables al ser expuesto en diferentes ambientes y tipos de estructuras, por ello escaló un paso más, y no será utilizado únicamente por los paracaidistas, sino por todo el personal militar de la Institución Aérea.
Este sistema de camuflaje que afecta la percepción visual, con una malla superpuesta en los pixeles en escala de grises, está plasmado en 50% algodón y 50% nylon, materiales utilizados para la elaboración del nuevo camuflado, el cual favorecerá las operaciones militares terrestres de la Fuerza.
Adicionalmente, la Institución establece la patente de diseño industrial de esta tecnología como propiedad intelectual ante la Superintendencia de Industria y Comercio, recibiendo así todos los derechos sobre este sistema.
Fuente: Prensa FAC