West Caribbean Airways se constituyó el 29 de diciembre de 1998 en la isla de San Andrés, al reunirse un grupo de empresarios antioqueños bajo el liderazgo de Hassan Tannir, nativo de la isla. Los 13 socios decidieron formar una nueva aerolínea que promoviera el transporte y el turismo desde y hacia el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, conectándolo con la costa atlántica colombiana, el interior del país y con Centroamérica. Fue constituida con un capital autorizado de $1.650 millones de pesos, el requerido por la autoridad aeronáutica para su operación. Durante un año se realizaron los trámites ante la Aeronáutica Civil para obtener el permiso de operaciones.
Finalmente, el primer vuelo se realizó el 13 de noviembre de 1999. La compañía comenzó a operar con tres aviones Let-410 de fabricación checa, con capacidad para 19 pasajeros, (HK-4146-X, HK-4151-X y HK-4159-X) pertenecientes a la empresa Heliandes, uniendo San Andrés con Providencia, ruta que antes era cubierta por SAM-Helicol con aviones Twin Otter. La operación parecía ser un éxito, llenando de orgullo a los habitantes del archipiélago que sentían que por fin tenían un servicio asequible y confiable entre las islas.
Con el fin de ampliar su operación la compañía fue a audiencia pública ante la Aeronáutica Civil el 12 de mayo del 2000, tras la cual se le aprobó la operación de las rutas desde San Andrés hacia Cartagena, Montería y Barranquilla. Dichas rutas serian cubiertas con equipos ATR 42-300 con capacidad para 44 pasajeros que la compañía adquirió mediante leasing. La idea era comenzar a operar estas rutas desde el 1 de diciembre de ese año. También solicitó rutas internacionales desde San Andrés hacia Varadero en Cuba, Ciudad de Panamá y San José de Costa Rica, que comenzarían a operar a principios del 2001. Para entonces la aerolínea ya contaba con 60 empleados y con la apertura de las nuevas rutas en la costa estaría generando entre 100 y 120 empleos directos. A pesar de la depresión en el mercado local, San Andrés era un destino atractivo por sus condiciones de seguridad, que garantizaban un flujo de pasajeros permanente. Durante el primer año de operaciones West Caribbean movilizó entre San Andrés y Providencia 50.000 pasajeros, con cuatro vuelos diarios que subían a cinco en temporada alta.
El accionista mayoritario Hassan Tannir decidió vender su participación en la aerolínea y West Caribbean Airways trasladó su centro de operaciones a la ciudad de Medellín. Bajo el liderazgo del Capitán Jorge Pérez la compañía había tomado la decisión de aprovechar la crisis en que venían Avianca y ACES. Para este propósito comenzaron a operar regionalmente desde el Aeropuerto Olaya Herrera con sus aviones Let-410 y ATR-42 haciéndole competencia a la debilitada ACES, en rutas hacia Apartadó, Montería, Turbo, El Bagre, Caucasia, Tolú, Chigorodó, Otú, Quibdó, Puerto Berrío, entre otras, consideradas desde hacía mucho tiempo terreno de la aerolínea naranja. De hecho, cuatro de sus aviones ATR-42 eventualmente pasaron a la flota de West Caribbean: HK-3678-X, HK-3943-X, VP-BCC y el VP-BNH. Mientras tanto desde el Aeropuerto José María Córdova comenzaban operaciones a Ciudad de Panamá, San José de Costa Rica y Aruba. Más adelante se logró la aprobación de la operación en las rutas troncales desde Medellín a ciudades como Bogotá y Cali.
Avión ATR-42, matrícula VP-BBC en el Aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla de San Andrés (Foto: Colección Jaime Escobar)
Avión ATR-42, matrícula VP-BNH en el Aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla de San Andrés (Foto: Colección Jaime Escobar)
Continuaron con su expansión a un ritmo muy acelerado, trayendo dos aviones McDonnell-Douglas MD-82 (HK-4302 y HK-4205) con los cuales operaban sus rutas troncales e internacionales, ofreciendo los mejores precios del mercado, además de cubrir en un corto plazo más de 20 rutas al interior de Colombia. Adicionalmente, se fundó una filial en Costa Rica llamada West Caribbean Costa Rica, para iniciar operaciones regionales desde San José y se preparaban para seguir con los planes de abrir otra filial en Aruba con fines similares. Paralelamente construyeron un hangar propio para mantenimiento en el Aeropuerto José María Córdova. Se efectuaron varios vuelos chárter a Punta Cana en la República Dominicana y la idea era operar un servicio regular desde Bogotá con un vuelo semanal. De igual manera se llevaron a cabo varios vuelos chárter a las Islas Caimán. Todo parecía ir muy bien para West Caribbean Airways, tanto que hubo algunos rumores con respecto de tener ofertas de compra por parte de tres aerolíneas extranjeras, rumores que rápidamente fueron desmentidos.
Avión McDonell Douglas MD-82, matrícula HK-4374-X, en el Aeropuerto Eldorado con los colores de la que sería West Caribbean Aruba, en mayo del 2005. Este avión protagonizaría el accidente que terminó con las operaciones de la aerolínea (Foto: Jaime Escobar)
Además de las rutas troncales de Bogotá a Medellín y Cali, que eran operadas con MD-82 en cuatro dobles frecuencias semanales, se inauguraron las nuevas rutas Bogotá – Montería y Bogotá – Arauca con los MD-82 y Bogotá – Armenia y Bogotá – Manizales con los ATR-42, promocionando a la aerolínea como West Caribbean Airways “Una manera diferente de volar”.
West Caribbean Airways cambió su imagen corporativa, sin embargo las cosas ya no parecían tan claras para la aerolínea. Se comentaba que habían surgido problemas financieros derivados de la subida de los precios del combustible, del aumento en las tarifas de los seguros y los arriendos de los aviones, además de problemas administrativos propios de la aerolínea como deudas bancarias y aviones subutilizados. Incluso se dijo que West Caribbean Airways dejó de pagar salarios a sus empleados y que había comenzado a utilizar dineros destinados para gastos vitales, como mantenimiento de las aeronaves, en otras cosas. A esto se sumaban rumores de que la empresa tenía relaciones con el narcotráfico, sin embargo estos rumores nunca tuvieron fundamento.
En diciembre del 2004 la compañía contaba con 12 aeronaves y operaban cinco rutas regionales, 13 rutas nacionales y siete internacionales. En el 2005 seis de sus aviones fueron puestos en tierra por sus arrendadores ante los atrasos en los pagos de los contratos de leasing. De los restantes cuatro, quedaron dos en servicio y dos en mantenimiento.
West Caribbean Airways comenzó un proceso de deterioro financiero. En enero de 2005 la Aerocivil suspendió la operación de la aerolínea por unos días y le impuso una multa de más de $100 millones de pesos debido a observaciones que se habían producido en el año 2004, que especificaban que West Caribbean Airways había quebrantado varias normas del Reglamento Aeronáutico Colombiano, entre ellas manejo indebido del libro de vuelo, problemas con el mantenimiento y chequeos, problemas con el entrenamiento de las tripulaciones y exceder tiempos de vuelo permitidos para tripulaciones, entre otras. La aerolínea interpuso un recurso de reposición y alegó que no habían tenido ningún problema con sus aviones, cosa que hasta ese momento era cierta, ya que de los más de 130 accidentes ocurridos en Colombia desde 2001 hasta 2004, West Caribbean Airways no había estado involucrada en ninguno.
A comienzos de marzo se anuncio que la ruta entre San Andrés y la isla de Providencia quedaría suspendida a partir del primero de noviembre del 2005, debido a una decisión de la Junta Directiva de la aerolínea que argumentaba la falta de apoyo de las autoridades locales y de la comunidad. Los dirigentes de la compañía argumentaban que habían tenido obstáculos para realizar su labor, debido a que no se les había permitido construir un hangar en el aeropuerto de San Andrés para guardar sus aeronaves y protegerlas del deterioro originado en la salinidad del ambiente. También aseguraban que no se habían hecho arreglos en el aeropuerto El Embrujo de Providencia, donde los huecos y la maleza estaban ocasionando el desgaste de las aeronaves. Adicionalmente, se quejaban de que las autoridades de control migratorio no les habían otorgado el derecho a la residencia permanente a los tripulantes y técnicos de la compañía, lo que les originaba costos excesivos.
De suspenderse las operaciones, los 5 mil habitantes de Providencia quedarían aislados pues West Caribbean era la única que prestaba el servicio aéreo entre las dos islas, separadas por 80 kilómetros de mar. La otra alternativa era viajar por barco, pero el recorrido se demora unas 8 horas. La decisión del retiro originó duras críticas en Providencia. A West Caribbean la acusaban de haber utilizado la isla para obtener la licencia de la Aerocivil para operar otras rutas de Colombia y Centroamérica y dejar abandonada a esa comunidad. Los problemas de transporte entre Providencia y San Andrés se habían agudizado desde hacía cinco años cuando la estatal Satena había dejado de prestar el servicio por considerar poco rentable el negocio.
En marzo 26 de 2005, durante la temporada de Semana Santa, un Let-410, el HK-4146 se estrelló al despegar del Aeropuerto El Embrujo de Providencia, accidente en el cual murieron 8 de los 14 ocupantes, entre ellos los dos pilotos, el capitán Rodolfo Blanco y el copiloto Edwin Dagoberto Giraldo. De inmediato se suspendió el servicio entre las islas.
Para mayo de 2005 West Caribbean Airways se vio intervenida por la Superintendencia de Puertos y Transporte que encontró una gravísima situación financiera: de cada peso que tenían en activos, debían 94 centavos. Por esta razón les dio un año para llevar a cabo un plan de recuperación que no parecía muy factible. La compañía entonces comenzó a suspender operaciones, a entregar algunos aviones y dejar otros en tierra obligatoriamente, pues no tenía como mantenerlos, hasta el punto que sólo tenían un avión operando en vuelos chárter.
El McDonnell-Douglas MD-82 matriculado como HK-4374-X, había pertenecido a Continental Airlines antes de ser adquirido por la aerolínea. Con este avión se pretendía mantener las operaciones en modalidad chárter, mientras se decidía un plan para mantener a flote la aerolínea. Se dice que hubo acercamientos comerciales con la aerolínea venezolana Aeropostal quienes propusieron un plan de rescate financiero.
El 15 de Agosto de 2005 en horas de la noche el MD-82 salió del Aeropuerto José María Córdova de Rionegro hacia el Aeropuerto Tocúmen de Panamá. De allí partió el vuelo 708 con 152 pasajeros de nacionalidad francesa y 8 tripulantes colombianos hacia el aeropuerto Le Lamentin de Fort-de-France, en Martinica a las 0600 horas GMT. Aproximadamente a las 0705 GMT el avión se precipitó a tierra en las cercanías del pueblo de Machiques, en el Estado Zulia en Venezuela, a unos 30 kilómetros de la frontera con Colombia, después de haber reportado problemas con los motores. El avión había pedido varias autorizaciones seguidas para descender y aterrizar de emergencia en el Aeropuerto La Chinita de Maracaibo, luego de perder el control y entrar en una caída de más de 7000 pies por minuto. No hubo ningún sobreviviente.
Dos de los ocho tripulantes de nacionalidad Colombiana fallecidos en el accidente de Machiques. A la izquiera la Auxiliar de Vuelo Ángela Peña, oriunda de Bogotá y de 20 años de edad. A la derecha el Primer Oficial David Muñoz, oriundo de Medellín y de 21 años de edad.
El accidente marcó la terminación de las operaciones de West Caribbean Airways y el comienzo de otro capítulo, esta vez lleno de acusaciones entre los familiares de las víctimas, los accionistas, los funcionarios de la aerolínea y la Aeronáutica Civil, entre otros actores. Mientras tanto, en el Aeropuerto José María Córdova de Rionegro permanecía el hangar que habían construido, y dentro de este los otros 2 Aviones McDonnell-Douglas MD-80 de su propiedad. En el Aeropuerto Olaya Herrera de Medellín permaneció un ATR-42 por mucho tiempo, hasta que fue partido y parte de su fuselaje fue a parar al hangar de mantenimiento de la Escuela de Aviación Los Halcones.
A raíz de los accidentes y de las intervenciones de las diferentes entidades del Estado, ya no quedaba otra alternativa que convocar a una asamblea extraordinaria de accionistas que tuvo lugar en septiembre del 2005 para tomar la decisión de liquidar la sociedad. Los doce socios encabezados por Heliandes S.A., empresa del capitán Jorge Pérez, tuvieron que asumir la responsabilidad civil por las enormes indemnizaciones que generó el accidente en Venezuela, y la carga laboral de sus 550 empleados, junto con las millonarias deudas a los acreedores y las altas cargas fiscales y parafiscales.
En ocasiones reaparecen rumores de la compra de los activos que le quedan a West Caribbean Airways por parte de Aeropostal u otras salidas que podría tener este capítulo. Durante algunos meses se vio un letrero en su (ex) hangar de mantenimiento en el Aeropuerto José María Córdova que decía “Se Vende”. Sin embargo todavía no ha habido ninguna acción concreta y el asunto pareciera estar estancado.
De esta manera, lo que comenzó como un sueño de un grupo de empresarios antioquenos de prestar con excelente calidad el servicio de transporte aéreo, contando para ello con una moderna flota de aeronaves y con el más capacitado y experimentado talento humano, terminó en un gran fracaso. Este fue el triste fin de otra aerolínea que sorprendió al mercado colombiano con su vertiginoso crecimiento, su moderno diseño y capacidad de captación de pasajeros.
Nacionales: Apartadó, Armenia, Barranquilla, Bogotá, Cali, Cartagena, Caucasia, Cúcuta, Chigorodó, El Bagre, Manizales, Medellín, Montería, Otú, Pereira, Providencia, Puerto Berrío, Quibdó, San Andrés, Tolú, Turbo, Urrao.
Internacionales: Aruba, Ciudad de Panamá, San José de Costa Rica.
Let-410 UVP-E
ATR-42-320
McDonnell-Douglas MD-80
Códigos:
OACI: WCW
IATA:YH
Período de Operación:
1998 – 2005
1 La información de destinos y flota corresponde a todos los destinos y tipos de Aviones que operó la Aerolínea durante su existencia (hasta donde sabemos) y no a ningún periodo en particular, a diferencia de los artículos sobre Aerolíneas que están operando, cuya información corresponde a los destinos y tipos de Aviones a los que vuela y opera la Aerolínea actualmente sin tomar en cuenta destinos abandonados o Aviones sacados de circulación.
Última actualización: 1 de mayo de 2011