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Líneas Aéreas del Caribe – LAC

Limitada Nacional de Servicio Aéreo - LANSA
Vías Aéreas Colombianas - Viarco
Líneas Aéreas del Caribe – LAC
Reseña Histórica:

Por una iniciativa del Capitán Luís Carlos Donado Velilla, quién se quería retirar de Aerocosta y montar una nueva Aerolínea solo de su familia, nace el 28 de febrero de 1974 LINEAS AEREAS DEL CARIBE –LAC- como una sociedad limitada siendo sus primeros socios él, su señora María Fajardo de Donado y sus dos hermanos Orlando y Raúl Donado Velilla.

El Capi Lucho Donado ya tenía experiencia en la creación y desarrollo de aerolíneas, pues había sido cofundador de LATCO, Aerocóndor y de Aerocosta, empresas barranquilleras que lograron posicionamiento y liderazgo en el mercado aéreo de pasajeros y cargas.  El momento para iniciar una empresa solo de su familia era bueno y la decisión era por una carguera porque: “si la carga no habla y presenta tantos problemas, ¿cómo será una de pasajeros?” decía sabiamente el Capitán Donado Velilla.

 

Capitán Luís Carlos Donado Velilla.
Foto: Colección de Camilo Luengas.
 
En el año 1972, y a pesar de estar AEROCOSTA en su mejor momento, el Capitán Luís Carlos Donado (uno de los accionistas mayoritarios) estaba cansado de los socios que no eran familia y decide venderle esta aerolínea a FLORAMERICA. Los nuevos directivos de esta empresa no gustan mucho de los C-46 y es así como Lucho Donado les hace una propuesta de comprárselos por un precio un poco mayor del que ellos los habían adquirido pero con la condición que los dejaran operar bajo la bandera de AEROCOSTA hasta que LAC tuviera la aprobación de la Aerocivil. Así ocurrió y los hermanos Donado Velilla volaron sus dos Curtiss por los Llanos Orientales con bandera de Aerocosta pero facturando los vuelos como Donado Velilla Hermanos – DOVEL- hasta el 28 de febrero de 1974, cuando ya con permiso de operaciones de la Aerocivil Colombiana empiezan a volar como Líneas Aéreas del Caribe Ltda.

La empresa nació con dos aviones tipo Curtiss C-46 los cuales fueron pintados de color morado y los barranquilleros los apodaron “Los Obispos”. Estos aviones cubrían rutas nacionales entre la Costa Atlántica, los Llanos Orientales y la Capital de la República.

 HK-1282, Curtiss C-46D, 1974.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.

A mediados de Septiembre del mismo año 74, la empresa se transforma en anónima cerrada y se incluyen como socios a las esposas y los hijos de los hermanos Donado Velilla. Raúl Donado Velilla se traslada a Bogotá con su familia y Carlos Alberto Donado Fajardo (terminando sus estudios universitarios) se vincula a la empresa en Barranquilla.

 HK-1282, Curtiss C-46 en Barranquilla, 1975.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.
En Agosto de 1974 la empresa adquiere en Damasco (Siria) un Avión Douglas DC-6 (HK-1706) e inicia operaciones internacionales a Panamá, Isla Margarita (Venezuela) y algunas Islas del Caribe. A mediados de ese año LAC suscribe un importante acuerdo con la holandesa KLM mediante el cual se transportaban flores colombianas desde Bogotá hacia Curazao en donde hacían conexiones hacia Ámsterdam. En esos tiempos las agencias de carga líderes del mercado eran Colcarga (hoy UTI) y Florcarga (hoy DHL Danzas).
 HK-1706, Douglas DC-6B en Miami 1976.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.
Adicionalmente subscribe un importante contrato con El Tiempo y El Espectador para el transporte de la prensa todas las noches desde Bogotá hacia Barranquilla, Cali y Medellín.

En Agosto del año 1977, LAC vende los Curtiss y renueva su flota adquiriendo cuatro DC-6 en remate en Tucson (Arizona) de los cuales se pusieron a operar dos (HK-1702 Y HK-1703) y el resto se canibalizaron para repuestos. Con estos dos nuevos Douglas DC-6B se empieza a operar en octubre la recién aprobada ruta a Miami con tres frecuencias semanales, se incrementan a tres los vuelos semanales a Panamá y se abre la nueva ruta a Caracas.


 HK-1707, Douglas DC-6B en Miami, 1979.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.
En Marzo de 1978 llega el quinto DC-6B y la empresa reestructura sus rutas volando:
– Tres frecuencias semanales en la ruta BOG-BAQ-MIA
– Tres frecuencias semanales a Caracas
– Cuatro frecuencias semanales a Panamá
– Tres frecuencias semanales a Curazao
– Un vuelo semanal a Pointe-a-Pitre
– Seis vuelos semanales BOG-CTG-BAQ-BOG
– Seis vuelos semanales BOG-MDE-BOG
HK-1389, DC-6A/B con los colores de Cessnyca, 1975.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.

A finales del 78 el capitán Luís Carlos Donado le propone a sus socios (hermanos) que la empresa de el gran paso a la era del jet e invita a su amigo Juan B. Millón a que se vincule a la empresa para que le organice esta importante transición. El Capitán Juan B. Millón se vincula a LAC junto con su hermano Leonardo y sus dos hijos Johnny y Fernando.

El 19 de Junio de 1979 muere en Miami víctima de un cáncer el líder del grupo y cabeza de esa familia, el fundador de LAC Luís Carlos Donado Velilla. Sus últimos planes eran los de incursionar en la era del JET y desafortunadamente no los pudo ver realizados. Carlos Alberto Donado es enviado a Miami donde se radica y asume el cargo de Vicepresidente Ejecutivo. Orlando Donado Velilla asume la presidencia en Barranquilla y Raúl Donado Velilla la Vicepresidencia Comercial en Bogotá. Así se arma un nuevo equipo bajo la filosofía de la unión familiar. En este mismo año ingresa como copiloto el hijo menor del fundador, Álvaro Luís Donado Fajardo quien más tarde asumiría la gerencia de compras y posteriormente la Vicepresidencia Técnica con base en Miami.

Cumpliendo el deseo de su fundador, LAC ingresa a la era del JET en 1980 al adquirir en Londres un Douglas DC-8-54 el HK-2380, fue bautizado con el nombre de LUIS CARLOS DONADO VELILLA en honor de ese gran hombre, empresario, emprendedor y excelente miembro de familia. Con este avión se incrementaron las frecuencias a Miami a seis semanales y se estableció un vuelo diario a Panamá convirtiéndose esta aerolínea en la empresa líder en ese país. Con excelentes resultados, LAC decide adquirir a mediados de 1981 su segundo Jet Douglas DC-8-54 el HK-2632X bautizado con el nombre de Mary de Donado, quedando con una flota de cuatro aviones, dos de pistón y dos de turbinas.

 
 
LAC en la era del Jet, DC-8-54F HK-2380.
Imagen: Archivo El Tiempo, colección de Camilo Luengas.


 HK-2380, Douglas DC-8-54F con colores basicos de Transmeridian Air Cargo en Miami, 1980.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.

Con esta flota la empresa abre nuevas rutas internacionales e inicia con éxito la modalidad de vuelos chárter efectuando su primer vuelo transcontinental entre Alemania y Colombia transportando ganado vacuno. Igualmente efectúa vuelos desde Cali hacia Toronto transportando uvas y establece una ruta semanal en la ruta Barranquilla – Asunción – San Pablo – Bogotá.

En 1982 LAC opera nueve vuelos semanales a Miami, nueve vuelos semanales a Panamá, tres frecuencias semanales a Caracas, una frecuencia semanal a San Pablo (Viracopos) y una frecuencia quincenal a Buenos Aires y a Asunción.

HK-2380, Douglas DC-8-54F, en el aeropuerto Olaya Herrera de Medellín, 1982.
Foto: Werner Fischdick Collection vía Camilo Luengas.
En 1984 ingresa como Director Comercial con base en Bogotá Raúl Donado Osío, hijo de Raúl Donado Velilla y quien más tarde asumiría el puesto de su padre en la empresa. Para ese entonces la empresa ya ejercía una importante gestión en las bases de Miami y de Bogotá y se establecen nuevos vuelos de bajada (south-bound) desde Miami hacia Barranquilla, Cartagena, Cali, Medellín, Bucaramanga, Pereira y San Andrés. En ese mismo año el 18 de septiembre en Barranquilla el DC-8 HK-2380 en un vuelo proveniente de Miami, se sale de la pista al aterrizar tras una fuerte lluvia, el avión fue declarado por pérdida total, por fortuna sus tripulantes salieron ilesos tras el accidente.

En agosto de 1985 en el aeropuerto Olaya Herrera de Medellín el DC-8 HK-2632X luego de aterrizar proveniente de Miami se salió al final de la pista, sufriendo unos daños menores. El avión estuvo unos meses en reparación. A finales de dicho año el DC-8 hizo el ultimo despegue de la era de los avión de gran tamaño y marcaba el cierre del Olaya en esta clase de operaciones, tras la inauguración del aeropuerto Internacional José María Córdoba, en el momento del despegue estaban presentes la Aerocivil, Policía, fotógrafos de los diarios de Medellín y corresponsales de los canales de televisión cumpliendo el acontecimiento. La tripulación de ese vuelo estuvo compuesta por el capitán Roberto Gómez, primer oficial Álvaro Donado y el ingeniero de vuelo Carlos Ardila (qepd).

HK-2632X DC-8-54F “Mary de Donado” en Miami, 1982.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.
En 1986 la empresa se refuerza con el alquiler de un Jet Boeing 707-311C (N524SJ) y en Miami se suscriben importantes acuerdos de cooperación interlineal con empresas tales como STAF de Argentina, TAB de Bolivia, Fast Air de Chile, APISA de Perú y Tocumen Air Cargo de Panamá y se inician operaciones compartidas bajo la modalidad del Joint Venture con aviones de LAC.

N524SJ Boeing 707-311C en Miami, 1987.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.

En 1986 la empresa adquiere su tercer DC-8-54 y vende el último DC-6, renovación que le permitió ampliar a doce sus frecuencias semanales a Miami y a Panamá. En aquella época se respiraban aires de éxito a tal punto que LAC pautaba en televisión con dos muy buenos comerciales, patrocinaba a Juan Carlos Carbó en sus campeonatos mundiales de Ciclocrós (Carbó fue campeón mundial), a Diego Guzmán en la Formula Barber Saab y a un equipo de Baseball en la Capital de la República.

La aviación carguera colombiana en general atravesaba por su mejor momento y existía una limpia competencia entre empresas como Tampa, Arca, Millon Air, Sam Carga y LAC pero se venían cambios drásticos que empezarían a desequilibrar las arcas de estas empresas.

El narcotráfico empezaba a hacer estragos en las aerolíneas pues todo hallazgo de droga en un avión se convertía en multas millonarias en dólares. Gracias al lobby de las aerolíneas colombianas liderado por ATAC (Asociación de Transportadores Aéreos Colombianos) se logra en marzo de 1989 firmar entre la Aduana Americana y cada una de las aerolíneas el SUPER CARRIER INITIATIVE AIR mediante el cual cada una de las aerolíneas se obliga a cumplir con un mínimo de requisitos de seguridad y control si desean seguir operando a los Estados Unidos. De hecho Avianca, agobiada por las multas, decide retirar su Jumbo de carga y dedicarse solo a pasajeros.

Estas medidas exigidas por el Súper Carrier, entre las cuales mencionamos la implantación de circuitos cerrados de televisión en Bogotá y Miami, la contratación de departamentos de seguridad y la instalación de cuartos fríos y de balanzas de precisión, significaron gastos millonarios que no estaban presupuestados y que generaron un freno en los programas de crecimiento no solo de LAC sino de todas las empresas hermanas que estaban en similares situaciones.

Posteriormente surge la exigencia de la FAA de disminuir los niveles de ruido (Stage I) y surge la necesidad de instalar en cada aeronave un set de silenciadores (hush kit) cuyo valor por avión era de USD$1’300.000,oo y la condición era que debían estar instalados a mas tardar el 31 de diciembre de 1988. Para esa época LAC estaba pensando en adquirir un Jet Boeing 707-311C y se vio obligada a abortar sus planes y a buscar recursos externos mediante préstamos al IFI para cumplir con esa exigencia de la FAA.

Con muchas dificultades y “saltando matones” LAC logra instalar sus tres hush kits y la FAA decide en 1992 implantar la “SEGUNDA ETAPA DEL RUDO” (Stage II) la cual establecía que además de disminuir los decibeles de ruido había que disminuir los de contaminación ambiental. En ese momento esta nueva medida genera una crisis y mucho más cuando los fabricantes de aviones informan que la instalación de estos nuevos kits limitan el peso de las aeronaves y, aún más grave, sacan aviones del mercado como ocurrió con los Boeing 707-300F.

Los principios de los 90 se convierten en los años críticos para la aviación colombiana de carga. Absolutamente todas las aerolíneas atraviesan crisis y salen en busca de soluciones siendo las únicas la posibilidad de vender la aerolínea a un super-carrier europeo (KLM, Martinair, Air France, British) o asociarse entre ellas mismas conformando un holding que logre competir bajando costos gracias a las economías de escala.

El Presidente César Gaviria es un gran responsable de la génesis de la crisis al implantar una política de gobierno basada en una apertura económica sin tener en cuenta que la industria colombiana no estaba preparada para afrontar la competencia internacional que por calidad y precio arrasaría con todo el mercado nacional y generaría la quiebra de muchas empresas. El sector aéreo no quedó excluido de estas medidas de gobierno y la famosa POLÍTICA DE CIELOS ABIERTOS ocasionó el ingreso de mega empresas norteamericanas y europeas que entraron al país rompiendo tarifas y obligando a las aerolíneas colombianas a bajar los fletes para no perder a sus clientes muy a pesar que sus estructuras de costos no les daban ya que las mega carriers competían con economías de escala y aviones más grandes y menos consumidores de combustible. Fueron muchas las críticas y solicitudes que las aerolíneas colombianas elevaron contra el gobierno de turno y nula la respuesta de Gaviria quien estaba empecinado en demostrarles a los colombianos que la apertura económica era la solución del país.

Sube Samper a la presidencia, y con él surge el proceso 8.000, el deterioro de las relaciones colombo – americanas y la posterior descategorización aeronáutica quedando nuestro país en categoría dos, lo que significaba que ninguna aerolínea colombiana podía modificar su flota, ampliar frecuencias ni solicitar vuelos chárter con los Estados Unidos.

La situación económica de LAC era grave y la Junta de Socios decide solicitar en septiembre de 1995 la aprobación para entrar en Concordato, solicitud que fue aceptada. La empresa inicia un concordato preventivo en Diciembre de 1995 y se suscriben acuerdos de pago a mediano y largo plazo con los principales acreedores de la empresa.

Desafortunadamente el 4 de febrero de 1996 LAC sufre un accidente cuando el DC-8 de matrícula HK-3979 que despegaba hacia San Pablo en Brasil pierde velocidad de sustentación y cae sobre un barrio de Asunción – Paraguay por negligencia e imprudencia de su tripulación ocasionando la muerte de muchas personas y, tal vez, la misma muerte de LAC.

Para la empresa, este accidente fue funesto desde todo punto de vista. Primero porque los gastos extraordinarios ocasionados desbalancearon el flujo de caja e hicieron incumplir los acuerdos de pagos del Concordato; segundo porque al estar Colombia en categoría dos, la empresa no pudo alquilar otro avión para cubrir los compromisos comerciales adquiridos y mas en medio de una temporada de San Valentine y, tercero porque debido a la irresponsabilidad de los tripulantes y a la gravedad del accidente, la compañía de seguros se tomó tres meses para pagar la indemnización y esos fueron tres meses en los que LAC tuvo que seguir pagando su cuota de leasing del avión. Lo más grave y triste de mencionar es que, ese juego de los tres tripulantes del HK-3979 ocasionó que la FAA parara definitivamente a la empresa.

Los días de LAC estaban contados y más cuando la FAA decidió revisar individualmente a cada aerolínea colombiana que operara a Estados Unidos y, por supuesto fue a esta empresa a la primera que escogieron por lo reciente y extraordinario del accidente en Paraguay. Hacia el 20 de Junio, llegando a Miami, otro de sus DC-8 (HK-2632), es dejado en tierra por la FAA al encontrarle 16 reportes de mantenimiento (la mayoría de ellos inexistentes). La empresa siguió operando con un solo avión y el 28 de Junio de 1996 la FAA deja en tierra su ultima aeronave (HK-3842). La FAA en conjunto con la Aerocivil de Colombia, sin haber solicitado ninguna documentación y sin pruebas justificadas, determinaron que el accidente del HK-3979 ocurrido en Asunción se había debido a falta de entrenamiento a las tripulaciones e injusta e irregularmente ordenan sacar todos los aviones de LAC de los OSPECS (Especificaciones de Operaciones) privando a la empresa de volar a los Estados Unidos y es cuando sus directivas se ven obligadas a decretar la quiebra de la empresa.

HK-3842X, DC-8-52F, fuera de servicio en Miami, junio de 1996.
Foto: Savvas Garozis vía Camilo Luengas.

Hoy, después de muchos años de la quiebra de LAC, podemos decir que, aunque esta empresa barranquillera fue la primera en cerrar, la falta de apoyo del gobierno nacional y más específicamente de la Aerocivil, el destino y las circunstancias externas (etapas del ruido, súper carrier initiative air, descategorización aeronáutica, proceso 8000, etc.) presagiaban que se acabarían todas las aerolíneas colombianas y así sucedió después con Arca, Millón Air (USA), Air Girag, SAM Cargo y ATC, y sólo se salvó TAMPA, empresa que a última hora fue adquirida por Martinair de Holanda.

¿Que si LAC hubiera podido sobrevivir a esa crisis de los 90? Nadie lo sabe. Lo que si podemos decir es que estas empresas familiares se constituyeron en bolsas de empleo familiares en las que el perfil del cargo no lo daba el conocimiento ni la experiencia sino el parentesco. (En LAC trabajaban más de 16 Donado incluyendo parientes políticos). Esta característica tal vez frenó un poco la posibilidad de profesionalizarse y de entrar a competir en una apertura de cielos que permitía el ingreso de mega aerolíneas cuyos costos operativos eran muchos menores gracias a sus economías de escala.

Un sabor amargo si le quedó a los Donado y a la gran familia LAC por la ausencia de gobierno colombiano y la falta de colaboración de la Aerocivil especialmente de los Capitanes Duarte y Cabrera quienes, en vez de apoyar y defender a las aerolíneas colombianas se entregaron a la FAA ya que su único norte era lograr la recertificación aeronáutica que tanto preocupaba al presidente Samper. La historia dirá que tan responsable fue esa administración del Dr. Abel Jiménez como Director de la Aerocivil y de estos dos altos funcionarios que terminaron por acabar a las aerolíneas colombianas de carga.

Hoy recordamos con nostalgia esos aviones blancos con azules que llevaban el triangulo de LAC en su cola y que fueron comandados por excelentes y muy experimentados capitanes entre los que mencionamos a Fernando, Álvaro Luís, Pedro y David Donado, a Juan B, Leonardo, Johnny y Fernando Millón, Claudio Jaramillo, William Rubiano, Camilo Barrios, Juan Lens, Roberto Gómez padre e hijo, Miguel Ortiz, Santiago Diago, Roberto Jiménez Jr, Rodolfo Rodríguez, Luís Carlos Carrillo, Hernán Clavijo, Peter Goebel, Horacio Luna, Humberto Vilar, José “JJ” Jaramillo, Felipe Luna y muchos otros que trabajaban con mucho amor por la empresa colaborando irrestricta e incondicionalmente en una época en la que los duties de los pilotos no eran tan controlados.


 HK-2632X, Douglas DC-8-54F en Miami, 1988.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.

Imposible dejar de mencionar a otras personas que colaboraron con LAC en sus veintidós años de existencia. Herman Olarte, Julio Martín Flores, Jorge Garcés, Fernando Ruiz, Guillermo Flores, Eugenia Zafra, Diego Pardo Tovar, Pedro Donado Velilla, Alfredo Ceballos, Enrique Oswaldo Fajardo, Carlos Daniel Abello Roca, Luis Carlos Donado Villalobos, Hernando Rosado Zamudio, Betty Blanco, Elsy de Luna, David “El pelao Alegre” Álvarez y sus dos hijos David Jr. Y Ernesto “Tico” Álvarez, Benjamín Arteta, Mladens Sekulits, Ambrosio Abdala, Rafael Núñez, Álvaro Gallardo, Julio Ferrer, Alberto Medina Plazas, Iván Calderón, Carlos M. García, Domingo Leal, Cecilia Cervera, John Guevara, Carlos “El Papo” Vidal, Álvaro Gallardo, Rodolfo Rodríguez, Darío Vélez, Rafael Escorcia, Eugenio González, Arnaldo Salazar, Santander Cabrera, Guillermo Bischoff, Mario Copelenco, Isis Reyes, José Reyes Galván, Ramiro y Francisco De Castro Magri, Martha Marina Munera, Héctor Erazo, Daniel Álvarez, Edilberto Cardozo, Jorge Ocampo López, Alberto Rodríguez, Jaime Espinoza, Rubén Trespalacios, Marcos y Claudio Keller, Miguel Bernal, Abel Cuenca, Manuel Rozo, Guillermo Cajiao, Eduardo Bujato, Lucy de Mora, Nancy Mass, Zunilda Vargas, Santander Henríquez, Alfredo Devis, Francisco Bazzani, Jaime Góngora, Rosa de Robayo, Gustavo León, Oscar Zafra, Carlos Gaona, Fernando Carvajal, Jorge Arias, José del C Caro, Nemesio “El Teniente” Rodríguez, Gabriel Villalba, Helena de Altamiranda, Robinson Quintana, Luis Enrique Baena, Ernesto y Jorge Fernández, Néstor Zamudio, Oscar Posada, Germán Smith, Clara de Sánchez, Martha Vargas, José Yopafa, Luis Carlos Uribe, Ramiro José De Castro O, Néstor Rozo, Jorge Rincón, Pedro Del Toro, José Ignacio Díaz, Carlos Zorro, Miguel López, Ramiro Manjarrez, Andrés Lopera, Víctor Valenzuela, Arturo Molina, Luis Bellido, Roberto y Armando Pardey, Remberto Santamaría, Cesar Alvear, Santiago Reatiga, Adolfo Bustamante, Narciso “El Perro” Camargo, Blanco & Blanco. Seguro hemos dejado de mencionar a muchos pero a todos los recordamos con cariño y agradecimiento.

Tripulaciones de la primera etapa de LAC que también recordamos son: Ángel De La Cuesta, Nicanor Miranda, Stanley Castro S, Manuel Cervera Romero, Mayor Jaime Roa, Orlando “El Cuco” Correa, Armando Duplat, Frank Battiston, Alfredo Londoño, Efraín Medina A, Ricardo “El Guajiro” Durán, Hernando Juliao V, Germán Ríos F, Sergio Gómez Velilla, Osiris Maldonado Jr, Guillermo Álvarez V, Héctor León, Luís Carlos Herrera, Orlando Royero, Eduardo Pedraza, Gustavo Cañas, José Seija, Juan C Monterrosa, Tarsicio De Alba, Jaime Angarita.

LAC por muchos años hizo patria generando empleo directo para más de doscientos cincuenta colombianos y unos doscientos empleos indirectos para otros compatriotas, o sea que eran cuatrocientos cincuenta las familias que vivían de esta aerolínea. Muchos colombianos, ya que la política de los hermanos Donado Velilla era la de darle trabajo ante todo a sus coterráneos y así lo intentaron en todas las estaciones internacionales.

Difícil para las segundas generaciones de los Donado, de los Millón, de los Gutiérrez, los Giraldo, los Coulson tratar de volver a crear una aerolínea. Muchas han sido las veces que nos hemos reunido alrededor de un almuerzo o de una rica cena para soñar juntos en esa posibilidad pero las condiciones ya no son las mismas y la aviación actual ha cambiado tanto que la realidad nos aterriza y nos recuerda que gracias a LAC y a esas lindas empresas familiares todos pudimos estudiar y crecer con ciertas comodidades por lo que lo único que nos queda es darle gracias a Dios por habernos dado esa oportunidad y gracias a esos “queridos viejos” por haberse atrevido a crear aerolíneas.

Nota: Agradecimeintos especiales a Christian Volpati, Werner Fischdick y a Savvas Garozis por compartir su archivo fotografico.

Destinos1:

Nacionales: Barranquilla, Bogotá, Bucaramanga, Cali, Medellín, Pereira, San Andrés. 
Internacionales: Asunción, Buenos Aires, Caracas, Ciudad de Panamá, Curaçao, Frankfurt, Miami, Pointe-a-Pitre, Porlamar, Sao Paulo, Toronto.
Flota1:

Boeing 707
Curtiss C-46
Douglas DC-6B
Douglas DC-8-50


Códigos:

OACI: LIC
IATA: LC


Período de Operación:

1974 – 1996


Enlaces de Interés (algunos enlaces podrían abrirse en una ventana nueva):



 HK-1702, Douglas DC-6A “Ciudad de Pereira” en Miami, 1987.
Foto: Christian Volpati vía Camilo Luengas.

1 La información de destinos y flota corresponde a todos los destinos y tipos de Aviones que operó la Aerolínea durante su existencia (hasta donde sabemos) y no a ningún periodo en particular, a diferencia de los artículos sobre Aerolíneas que están operando, cuya información corresponde a los destinos y tipos de Aviones a los que vuela y opera la Aerolínea actualmente sin tomar en cuenta destinos abandonados o Aviones sacados de circulación. 

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