El COVID-19 ha tenido un impacto significativo en el sector de los viajes y el turismo, que ha sido durante mucho tiempo un contribuyente clave para muchas economías. Una estimación reciente de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE por sus siglas en inglés) mostró que el turismo internacional se redujo en aproximadamente 80 por ciento en 2020. Antes de la pandemia, el turismo contribuía con más del 4 por ciento del PIB para el país promedio de la OCDE, y el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC por sus siglas en inglés) ha estimado que 174 millones de puestos de trabajo están en peligro en todo el mundo.
Al unísono, los directores ejecutivos de las tres alianzas globales, Kristin Colvile de SkyTeam, Rob Gurney de oneworld y Jeffrey Goh de Star Alliance, manifestaron: “Los viajes aéreos y el turismo internacional son vitales para la economía mundial. Con una cantidad considerable de datos ahora disponibles para respaldar las decisiones gubernamentales en la gestión de riesgos, la acción decisiva de los miembros del G7 para abrir fronteras y respaldar medidas claras, coherentes y basadas en datos eliminaría la incertidumbre, particularmente en torno a las pruebas y la cuarentena”.
Si bien los programas de vacunación ofrecen esperanza en algunos mercados, las reglas y los procedimientos que varían (y a menudo cambian rápidamente) entre países y en diferentes aeropuertos, continúan creando confusión y estrés para los clientes y perturbando los viajes. Para proporcionar la claridad que tanto se necesita, las alianzas, que en conjunto representan casi dos tercios de la capacidad aérea mundial antes del COVID-19, instan a los gobiernos del G7 a liderar el mundo para alinearse a las siguientes medidas de viaje para volver a conectar a los viajeros con el mundo, de forma segura:
- Los pasajeros completamente vacunados deberían estar exentos de cuarentena.
- Las pruebas de COVID-19 deben ser de fácil acceso, asequibles y consistentes.
- Los pasajeros en conexión en los aeropuertos no deberían estar sujetos a pruebas adicionales ni a restricciones de cuarentena en el punto de transferencia si permanecen en la zona de tránsito.
Además, las tres alianzas mundiales de aerolíneas apoyan el llamado de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés) para que los gobiernos adopten procesos digitales para gestionar las credenciales sanitarias de los viajes, incluidos los certificados de vacunas y pruebas, y para que los Estados miembros del G7 acuerden requisitos y normas comunes para las credenciales sanitarias, tal como establecen la Organización Mundial de la Salud y la Organización de Aviación Civil Internacional.
“La vacunación tendrá un papel clave en la reanudación de los viajes aéreos y el turismo internacional. Abogamos firmemente por que los gobiernos acepten la vacunación acreditada como una razón segura y apropiada para evitar las cuarentenas. Mientras esperamos que la población mundial sea sustancialmente vacunada, es importante tener protocolos de prueba sólidos y consistentes, junto con soluciones digitales interoperables desarrolladas para facilitar el viaje del cliente”, mencionaron los tres directores ejecutivos de la alianza.
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