Un total de 76 aeronaves hicieron varias pasadas sobre la tribuna principal y la avenida 68, eje central del desfile militar que congregó también a más de 10.000 miembros de las Fuerzas Militares y de Policía. Incontables filas de aeronaves en distintas formaciones surcaron los cielos de la ciudad varias veces a medida que los espectadores vitoreaban a los hombres y mujeres que desfilaban.
Días antes la Fuerza Aérea realizó los ensayos correspondientes a este importante día, simultáneamente en la base aérea de Palanquero y en el aeropuerto ElDorado. El día domingo 18 de julio el espacio aéreo de la capital colombiana fue cerrado para que un reducido número de aeronaves hiciera varias pasadas sobre el que sería el escenario del desfile militar, anotando puntos de referencia y estableciendo todos los parámetros para aplicar luego en los vuelos en formación que tendrían lugar dos días después. Mientras tanto la base aérea de Palanquero recibió a pilotos y aeronaves de las distintas unidades de la FAC para realizar el ensayo general para el desfile. Casi 80 aeronaves abarrotaron las rampas y pista de la base aérea. Un espectáculo único, pudieron disfrutar quienes estuvieron cerca de la base, al tener despegues casi simultáneos de todo tipo de aeronaves durante casi una hora, para luego presenciar el ensayo de las maniobras y formaciones que los pilotos mostrarían luego en Bogotá.
La impresionante logística que demandó la revista aérea del Bicentenario reunió a cientos de hombres y mujeres de la FAC en varias unidades áreas. La base aérea de CATAM fue epicentro para que la operación se desarrollara con éxito.
Finalmente llegó el 20 de julio. A las 10:00 de la mañana el espacio aéreo en Bogotá y 10 millas alrededor, fue totalmente cerrado. Los aviones se dispusieron a despegar y los controladores aéreos militares estuvieron encargados de mantener el orden y la seguridad en el cielo capitalino. Encabezando todas las formaciones iba uno de los Mi-17 de la Aviación del Ejército Nacional que participó en la Operación Jaque, seguido de dos UH-60L Black Hawk con sendas banderas de Colombia y la Fuerza Aérea Colombiana colgando de sus vientres, meciendo a su vez un grupo de valerosos hombres. La emoción del público fue total y significó una excelente forma de abrir el espectáculo.
El segundo grupo en hacer su aparición fue el compuesto por el KC-137 y dos Kfir C10 recientemente adquiridos por la FAC en vuelo en formación. Luego un grupo de 5 T-37B Tweet y 4 OA-37B Dragonfly pasaron en apretada formación. La inmensa masa que siguió después la constituían 22 aeronaves A-29B Super Tucano que, volando majestuosamente en formación, pasaron sobre la tribuna principal. La impresionante precisión del vuelo de 5 aeronaves C-130 Hércules sorprendió a los asistentes. El gran tamaño de los aviones no fue ningún obstáculo para que sus tripulaciones demostraran las excelentes habilidades en vuelo que poseen. Los aviones de transporte continuaron su exhibición con 3 aviones CASA C-295 en formación. Luego, un grupo de 12 aeronaves, entre Kfir y Mirage, hizo su aparición. El sonido de los motores silbando por el cielo de la ciudad y la precisión en la formación de los aviones mantuvo expectante a la multitud. Las aeronaves de ala rotatoria volvieron a aparecer, esta vez con un grupo de 11 Bell 206B-3 Jetranger II pertenecientes al Comando Aéreo de Combate Número 4 de Melgar. 6 de los famosos y temidos helicópteros Arpía pasaron luego sobre la avenida, dejando tras de sí un fuerte eco. 3 aviones Bronco OV-10A cerraron las distintas presentaciones.
Todos los aviones realizaron varias pasadas en distintas formaciones, las incontables luces que se veían a lo lejos emocionaban a los espectadores que esperaban por ver cada una de las pasadas. Durante casi 2 horas las aeronaves de la FAC fueron dueñas del espacio aéreo bogotano. Al final del desfile, cerca de las 12 del día, dos helicópteros Arpía hicieron una impresionante maniobra sobre la tribuna principal, sin duda una excelente forma de dar por terminada la revista.
El espacio aéreo fue reabierto y quedaba ahora la sensación en el aire de lo que había acabado de suceder. Nunca antes los colombianos habían visto tal cantidad de aviones volando al mismo tiempo. La Fuerza Aérea Colombiana desplegó una gran parte de su poder aéreo sobre Bogotá y dejó más que satisfechos y sorprendidos a todos quienes vieron el desfile. Luego de terminada la operación aérea, los aviones regresaron, unos a sus bases, otros a la base aérea de CATAM en donde, luego de reabastecerse de combustible, partieron de la ciudad.
Reabastecimiento en vuelo sobre la ciudad, vuelos en apretada formación, aeronaves de gran tamaño volando a baja altura y en estrecha formación, multitud de aviones rugiendo por el cielo, todo un conjunto de momentos que quedará por siempre en la historia de Colombia, de la Fuerza Aérea Colombiana y de la aviación colombiana. Los hombres y mujeres de la Fuerza Aérea Colombiana que hicieron posible la impresionante revista aérea del 20 de julio de 2010 son los verdaderos titanes que con su trabajo lograron llevar a cabo, sin ningún error, ni incidente, ni mucho menos accidente, la gran revista aérea que engalanó la celebración.
Los aviones que tomaron parte en la exhibición portaban orgullosos el logotipo del Bicentenario de Colombia. Estuvieron presentes en el desfile:
1 Mi-17-1V
1 Bell UH-1H Huey II
2 UH-60L Black Hawk
4 AH-60L Arpía III
1 Boeing KC-137
12 IAI Kfir C7/TC7/C10/C12/TC-12
2 Mirage M5 COAM /CODM
5 Lockheed C-130B/H Hércules
3 CASA C-295M
3 Rockwell OV-10A Bronco
11 Bell 206B-3 Jetranger II
22 Embraer A-29B Super Tucano
5 Cessna A37B Tweet
4 Cessna OA-37B Dragonfly
